Noticias del Santuario
CRÓNICA DA ROMARÍA DAS PASCUILLAS NA HONRA DA NOSA SEÑORA DA FRANQUEIRA
A Franqueira, 25 de mayo de 2015
"Procuren ir comenzando siempre de bien en mejor"
Santa Teresa de Jesús
Esta frase de la Santa abulense presidía la celebración de la Romería de Pascuillas de este año en A Franqueira. Y es que, quien mejor que la santa andariega, para centrar la mirada de los millares de peregrinos que se dieron cita este tradicional encuentro en este Santuario Diocesano. Desde primeras horas de la madrigada comienzan a sonar a lo lejos las bombas que anuncian la salida de las peregrinaciones parroquiales, este año superando las 70 imágenes, que haciendo larga y penosa peregrinación en muchos casos, alcanzan, ya con el sol reluciendo las pequeñas calles de la antigua villa monacal da Franqueira. Todo está dispuesto, a las 8,30 asciende desde el Santuario la cruz, el estandarte, el pendón procesional y la imagen de la Virgen del Rosario, con quien recibirán las comitivas que se acercan al recinto preparado para la ocasión. La primera en hacer su entrada, como es tradición, la parroquia vecina de San Sebastián de Achas, quien en esta ocasión venía acompañada de la anfitriona de este año: Santa Teresa de Jesús. Realizadas las “cortesías o reverencias” fue colocada en el recién estrenado presbiterio del lugar. Ahora será la maestra de oración, junto al cuadro de la patrona del santuario, la que ayude a todos los peregrinos a vivir esta jornada festiva con entusiasmo y alegría, y acercándose a los sacramentos de la Reconciliación y la Eucaristía. La mañana fue ajetreada, un sinfín de gentes que compaginaban la visa a la Virgen en su Santuario y la participación en los rituales de la mañana. En torno a las 11 llega la otra comitiva esperada, en medio del bullicio, los PP carmelitas con el grupo de peregrinos de la parroquia viguesa del Carmen. Traen el rostro del cansancio escrito en su cara, pero una gran sonrisa por los nervios propios del acontecimiento que está a punto de comenzar. A las 11,30 las imágenes ya ocupan su lugar y ya nos disponemos para la celebración: distribución de folletos de cantos, colocación de la ofrenda, y ensayo de cantos.
A la hora prevista, las 12, el Sr. Obispo D. Luis comienza la Eucaristía. La carpa del recinto de 1.200 metros cuadrado se nos ha quedado pequeña, en torno a unas 5.000 personas pueden estar participando en la liturgia. Resuenan a lo largo de la celebración frases de Santa Teresa que nos acercan a la gran mujer de hace 500 años y actual en este del XXI. Finalizada la lectura del Evangelio, el texto de la Visitación, se presenta la ofrenda. Un cuadro de la santa es la ofrenda de los Padres Carmelitas, se entrega también la ofrenda de las comunidades de Carmelitas descalzas de O Rosal y Sabarís. La parroquia da Cañiza hace una presentación de la figura de la Santa: mujer inquieta y peregrina, mujer de letras y escritora, mujer de oración que nos enseña a orar. A los pies del altar quedan puestos las sandalias, el zurrón y el bastón, tierra y agua de la casa natal de Ávila, un libro facsímil de las fundaciones que pertenece a la Biblioteca del Seminario Menor, y los frutos de la tierra símbolo de la fructosidad del Espíritu.
La homilía del Sr. Obispo se centró en el papel de la mujer en la vida de la Iglesia y de la sociedad, teniendo como referente a las dos mujeres que hoy nos convocan: la Virgen María y Santa Teresa de Jesús. Seguida la liturgia, al final de la comunión, rezamos la oración del jubileo. Las comitivas de las parroquias salen en procesión hacia el santuario, un largo camino, para que se tenga espacio para esta magna manifestación de fe. La tarde es de despedida, ya en el atrio del templo, y en el interior del mismo. Cantos y música, con oraciones y plegarias, lágrimas y sonrisas, todo se entremezcla, para que, otra vez la pequeña aldea de A Franqueira quede en el silencio acostumbrado.
Solo una última palabra. No emocionó a todos cuando las miles de gargantas gritaron a una sola voz “Vuestra soy, para vos nací, ¿qué mandáis hacer de mí?